El concierto empezó con el Sol en todo lo alto, y hay cosas que sólo salen bien con la noche por testigo, los flamencos se mueven mejor por la noche y el concierto empezó frío, con un sonido muy deficiente que por momentos pareció enfadar al propio cantante.
En esta primera parte y a la luz del día "El cigala" nos desgrano temas de su último trabajo donde la gran novedad es la incorporación de una guitarra que con unos toques bluseros preciosos dan un tinte al disco impresionantes. En el directo y con los problemas de sonido a cuestas la guitarra sonaba demasiado alta tapando al resto de la banda y por momentos al propio cantante.
Esto no fue inconveniente para disfrutar del magnífico trabajo de Diego García "Twanguero", un guitarrista Valenciano que ha triunfado en todo el mundo con su sonido increíble que hace que de su guitarra salgan notas que te llevan desde el flamenco al tango pasando por la América profunda en un momento. Durante el concierto me recordó mucho al tipo de guitarras que lleva Santiago Auserón "Juán Perro" en sus directos, y posteriormente comprobé que Diego García a sido parte de su banda en más de una ocasión.
La noche empezó a caer, las copas empezaron a agotarse en las manos de "El cigala" y la magia llegó, el sonido se ajustó y todos pudimos disfrutar de algo muy grande. Todo empezó con un tema mano a mano de los dos guitarristas (Diego García y Dan Ben Lian) con el maestro, que hizo que de repente la piel se me erizara, sensación que no dejé hasta que a las dos horas de comenzar el concierto terminó.
Después pasamos al formato trío con un toque cubano impresionante y con Junitu al piano, Yesly Heredia al contrabajo e Isidro Suarez a la percusión ofreciendo momentos de altísima calidad musical. En esos momentos a todos se nos vino a la memoria el gran Bebo Valdés, para el que El Cigala no tuvo ninguna palabra de recuerdo, grave error en mi parecer.
En ese formato Diego "El Cigala" nos dejó una joya que espero encontrar pronto grabada en algún sitio, nos ofreció un tema de Camarón de la Isla adaptado al Son Cubano que hizo que el público totalmente entregado le diera la ovación de la noche.
El final, con el sonido a pleno rendimiento, fue la guinda que colmó el pastel unas cuantas canciones con el total de la banda en las que pudimos disfrutar de nuevo del gran guitarrista Diego García, ahora si acompañado por toda la banda y por el increíble gusto de "El Cigala".
Quizá no soy objetivo, todo estaba a favor el ambiente, la Sidra, la ciudad y sobre todo la compañía, pero me quedé con la impresión de vivir algo muy grande. Puede que el gran secreto de este músico sea que consigue reunir tipos de música que me gustan pero que no estoy acostumbrado a escuchar como el tango, el flamenco, el Son Cubano......y hace con ellos un Cocktail de Sonidos y de Olores insuperable.
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