El viernes pasado nos acercamos a Bilbao para ver a Vega más por la ganas de mi cuñado que por las mías, aunque reconozco que tenía curiosidad por reencontrarme con la chica que años atrás entró en OT guitarra en mano y me encanto. Muchos años después yo la tenía totalmente perdida la pista y no sabía muy bien lo que me iba a encontrar sobre el escenario, la tenía tan perdida la pista que incluso dude de si era ella quien recogía las entradas en la puerta, aunque después me di cuenta de que no, aunque se parecía.
Tampoco sabía en que formato tocaba ni el precio de la entrada, vamos que esto si que era una audición a ciegas y no las de la Voz.... El formato era con banda y llevaba batería, bajo, guitarra y ella con otra guitarra y algún apoyo mínimo en el teclado.
La primera sorpresa negativa fue el sonido, creo que el problema es que estaba un poco alto para el recinto que era, pues se te metía la guitarra en la cabeza y no dejaba entender nada de las letras de las canciones, después de varias canciones Vega pidió que la elevaran un poco el volumen y se la empezó a entender algo más aunque creo que lo que tenían que hacer era bajar el volumen del resto de instrumentos.
Luego me encontré una Vega muy Rockera, más de lo que me esperaba, y eso fue una gran sorpresa la voz de Vega me gusta en ese registro Rockero. Por lo que pude notar el estilo de Vega en estos años ha cambiado en varias ocasiones y no debe ser una artista fácil de encasillar, lo cual esta muy bien, aunque es un riesgo pues habrá cosas que te gusten y cosas que te horroricen, pero me gusta esta valentía.
De su repertorio me quedo con la sensación de que sus canciones cuentan cosas interesantes, pero no las puede entender bien, y con una sonido que estropeo una banda que no sonaba mal.
A los tres cuartos de hora de concierto Vega nos informo de que no la gusta el paripé de hacer que se va para salir a cantar los bises, filosofía que me gusta pues los bises deberían ser para cuando la gente esta encantada con el concierto y no una obligación. También nos comento que los conciertos eran para la gente y que si alguien quería una canción que la pidiera que el concierto duraría lo que el público quisiera.
Todo esto son cosas que gustan oír, pero cuando sabes que no las vas a cumplir es mejor callarse. A la hora y cuarto de concierto Vega dijo que era la última canción y por mas que su público, muy entregado, la pidió mas canciones y la decía títulos que quería escuchar, ella insistió en que era la última canción y que se iba. Ante la masiva petición de más, puso como excusa una entrevista en la radio, una hora y media más tarde, y canto su última canción y se acabo. Si a estos detalles le sumas que el concierto costaba 18 € en taquilla creo que fue una Vega un poco cara!!!.
Pues sí, si no quiere paripés que no diga lo de que el concierto va a durar hasta que la gente quiera y que pidan las canciones que quieran escuchar, un poco cutre tan poco tiempo. Un concierto así como mínimo debería durar 2 horas... Y luego la gente no entiende cómo vamos a ver tanto a Andrés Suárez, pues porque por 10 euros tienes 2 horas y media de buena música asegurada y son pedazos de conciertos. Pero claro, no todos pueden estar casi 3 horas cantando. A mí siempre me ha gustado Vega, la he seguido durante todos estos años, es cierto que va cambiando su estilo, más ñoño y pop al principio, para ir descubriéndose más rockera, más grave, más a lo Luz Casal (o a mí me recuerda a ella en el último disco). Lo que no me mola nada es la rebeldía que tiene últimamente, la chulería a veces con la que escribe (sigo también bastante lo que escribe) porque tampoco me la creo, por mucho que se rape el pelo, por mucho que la llamen anoréxica y se ponga a comer hamburguesas delante de una tuitcam de esas que se han puesto de moda entre los cantantes... en el fondo yo creo que quiere tapar su corazoncito débil y parece que dañado en muchas ocasiones.
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